Hay que crear conciencia al ver el problema de la cantidad de desechos que pasan por nuestras manos, sostiene Ginny Heinsen, Directora Ejecutiva de Sostenibilidad 3Rs.
La ecologista clama por soluciones y transformaciones individuales de toda la ciudadanía, que impulsarían los cambios sin esperar a que un gobierno o empresa decida hacerlos. Comprar frutas y vegetales sin empaque, a granel, en envases familiares, usar bolsas reutilizables, salir de casa con recipientes de agua son parte -explica Heinsen- de esta transformación. Siempre rechazando envases, bolsas o botellas plásticas que no necesitamos.
Rechazar es, precisamente, una de las R en la que Ginny hace más énfasis. “Una de las primeras R que se fomenta en lo que es la filosofía de residuo cero: Rechazar. Rechazar cosas que tú no necesitas. Entonces de ahí reducir, hay que reducir el consumo. Reutilizar lo que no puedas reducir y, finalmente, que no es lo más importante, ojalá no tengas nada que reciclar, tú reciclas”, explica.
La pasión de Heinsen por la vida sostenible es tal que, en su casa, tiene un centro de acopio comunitario de artículos de cartón, papel periódico y de oficina, cajas de medicina -que le llevan hasta
farmacéuticas-, botellas plásticas, entre otros, que son recogidas de ahí por recolectores del Movimiento Vecinos Verdes para reciclar.
Y ¿qué hace falta para que se tome más consciencia sobre la necesidad de vivir en armonía con el medioambiente? Ginny Heinsen afirma que hacen falta sanciones y consecuencias por los ilícitos ambientales, pues ahora mismo son procesos que pueden tardar años. La propuesta de Ley de Residuos -afirma- define más administrativamente cómo se ejecuta el ilícito y cómo se sanciona, por lo que están esperando que el Congreso Nacional la convierta en una realidad.