Las partículas portadoras del coronavirus mueren cinco minutos después de tomar las medidas de higiene recomendadas por los expertos ante la propagación de la infección respiratoria, que este martes registra 116,166 personas contagiadas y 4,088 fallecidas.

Así lo informó la doctora Angiolina Camilo Reynoso PhD, directora técnica del Instituto Nacional de Investigación de Enfermedades Infecto-Contagiosas (Inieicont), quien ha estudiado los antecedentes de los coronavirus humanos, identificado por primera vez en la década de 1960, llamado B81.

“Si una incubadora tiene un pacientico y ese pacientico se muere, eso se limpia y después se le pasa una toallita germicida (aprobada por los Estados Unidos para la desinfección en hospitales), y a los cinco minutos de haberle pasado ese wipes se puede poner otro paciente, y de eso están todos los estudios”, aseguró la especialista.

La infectóloga e investigadora dominicana dijo que las medidas de higiene siguen siendo las mismas emitidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), y citó el aislamiento de las personas que muestren signos de afección respiratoria como la principal acción para prevenir la propagación del virus.

“El tipo de aislamiento es respiratorio, porque si tienes un proceso gripal, al hablar, estornudar, toser, besar se dispersan en el aire esas gotitas. Al respirar, entran por las vías respiratorias superiores y si estás inmunocomprometida pasan a las vías respiratorias bajas, provocando neumonía grave”, explicó.

Un estudio publicado por científicos chinos establece que el coronavirus puede sobrevivir en el aire durante al menos 30 minutos y difundirse hasta 4,5 metros y además puede 'durar días' en superficies donde caigan gotas respiratorias infectadas, lo que aumenta el riesgo de contagio si una persona lo toca y luego se frota la cara.

El tiempo que el virus dura en la superficie depende de factores como la temperatura, según el estudio: por ejemplo, a alrededor de 37 grados centígrados puede sobrevivir de dos a tres días en materiales como vidrio, tela, metal, plástico o papel.

Se recuerda que una persona que resulte asintomática puede durante 14 días transmitir el coronavirus, porque ignora que es portadora de la enfermedad. Además, puede hacerse las pruebas y tener resultados negativos y en una segunda, puede dar positivo al virus.

Sobre la propagación del coronavirus en los centros de atención médica, asegura que la incidencia de infecciones intrahospitalarias disminuye considerablemente, ya que para la higienización de los pisos se utiliza el hipoclorito de sodio (cloro), y para las superficies (camas, incubadoras, lámparas, camas de pacientes) se usan las toallas germicidas (wipes) que están utilizando en los hospitales de Estados Unidos.

Recomendaciones OMS
— Lavar las manos a menudo con agua y jabón o con un desinfectante de manos a base de alcohol.

— Evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca.

— Cubrirse la boca con el codo al toser o estornudar o con un pañuelo. Tire el pañuelo inmediatamente y lávese las manos.

— Evitar viajes innecesarios, incluyendo vuelos largos y cruceros.

— Evitar multitudes y permanecer en casa el mayor tiempo posible.

— Mantener una distancia de cuatro metros de un contagiado.

— Llamar al médico en caso de presentar fiebre, tos o falta de aliento, y conseguir asistencia inmediata en caso de síntomas severos, incluyendo problemas respiratorios, dolor persistente en el pecho o confusión.

— Evitar compartir utensilios (cubiertos, vasos, servilletas, pañuelos) y otros objetos sin limpiarlos debidamente.

¿Cómo lavarse las manos?
Está científicamente comprobado que las manos son el principal vehículo de transmisión microbiana, por lo que se recomienda un lavado a profundidad, con agua y jabón, durante no menos de 40 a 60 segundos.

Hay que frotar bien ambas manos (palma y dorso) con un poco de jabón, limpiando bien entre los dedos, las uñas y hasta las muñecas. Enjuagarse bien con agua corriente y secarse con una toalla limpia, indica la OMS.

Cuando no se tiene al alcance un lugar para asear las manos, las autoridades sanitarias de diversos países instan a usar geles antisépticos, también conocidos como soluciones alcohólicas o geles hidroalcohólicos.