SANTO DOMINGO. El Barcelona Atlético necesitaba una victoria urgente. Y la gerencia también lo sabía, en un torneo que "no hay nada para nadie". Los resultados se hicieron presentes, con la producción inmediata del delantero haitiano Kens Germain.

Germain, quien no tiene historial de gran goleador, se unió en la semana y no se hizo esperar: puso la ventaja que jamás perdió la tropa que entrena el colombiano Sergio Bermúdez, cuando celaba el meridiano del cotejo ante el moribundo Atlético San Cristóbal, un gigante que no levanta cabeza desde las primeras dos fechas.

Según Bermúdez, el equipo espera que haga una mayor productiva dupla con el centrodelantero Peter Byers, quien ha sido un fiasco como goleador.

Ese resultado no sólo levanta la moral de los enclavados en el Gran Santo Domingo, sino que les devuelve a una plaza, que aunque todavía fuera de la cuadrúpeda clasificatoria, comienza a olerla.

Otro que tuvo que aparecer cuando más se necesitaba fue el internacional criollo Kelvin Rodríguez, quien aportó en el minuto 62 la tranquilidad y sentencia, ante un rival que al final dio un zarpazo insuficiente, con tanto en el minuto 89.

Barcelona rompió así una culebrilla que la despojó de diez puntos en cuatro partidos, y más que eso: la expulsó de la primera posición que por varias semanas domó.

"El equipo se ha mantenido unido. Hay que saber asimilar estos momentos, estar arriba y luego abajo", justificó Bermúdez.

Ahora la franjeada se coloca a cualquier combinación del fin de semana, cuando enfrente un rival (Delfines FC) que no ha sumado en todas las ocho jornadas agotadas en la LDF.

Barcelona ha tenido que acudir a movimientos, dado que sus estrellas no han brillado como se esperaba, sobre todo el centrodelantero Byers, todo un histórico goleador de la selección, que llegó a la liga como un portentoso ofensivo, con medias de un gol por cada 1.6 partidos, tanto en clubes como con su nacional Antigua-Barbuda.

Bermúdez recordó que la liga está a largo trecho de camino, por lo que hay que seguir sin mirar atrás. "Nuestra clave será la unión en todo momento".

Se espera que Germain, a pesar de no tener un historial de goleador, impregne nuevos aires al club, que no puede darse el lujo de volver a patinar por el violento empuje que han dado los equipos que hasta hace poco tiempo parecían descartados, como los casos de la "U" OyM y Moca FC.

Barcelona tendrá que ir en busca no sólo del resultado, a todas luces "pan comido", sino con el mayor margen posible para ver si desde ya regresa a los puestos clasificatorios, aunque contra un rival que ha venido sin dudas a más, con todo y seguir anulada su casilla de puntuación.