EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO.- El director del Nuevo Modelo Penitenciario, Ysmael Paniagua, informó que ya está lista toda la logística y la infraestructura para que unos 4,700 presos preventivos, diseminados en las 32 cárceles del país, puedan ejercer el derecho constitucional al voto en las elecciones generales de mayo del 2016.
Paniagua, expresó que la Junta Central Electoral (JCE), realizó el levantamiento de todos los datos e informaciones en torno a los presos que están aptos legalmente para ejercer esa prerrogativa constitucional, pero que sólo podrán votar para el nivel presidencial, no así para el congresual y municipal.
Sin embargo, Paniagua no supo explicar cómo funcionará lo relativo a la presencia en los recintos penitenciarios de los delegados de los partidos políticos que llevarán candidaturas presidenciales.
El funcionario, cuyo despacho depende de la Procuraduría General de la República, enfatizó que esa modalidad de sufragio, que se estrenará en el país a partir de los comicios del 2016, es un paso "muy importante, porque el voto penitenciario cumple con un aspecto legal y constitucional, que es el derecho que tiene todo ciudadano a elegir y ser elegido".
Asimismo, Paniagua garantizó que están dadas todas las condiciones y garantías para que esas votaciones se desarrollen de manera transparente, con diafanidad y en un clima de paz, sin el menor incidente, tal y como lo dispongan llegado su momento, los miembros de la JCE, que es el organismo responsable del montaje del proceso.
Según detalló, los privados de libertad que en están en condición de preventivos, son los únicos que podrán ejercer el derecho al voto, porque conforme con la legislación, mientras no sean condenados, gozan de sus derechos civiles.
Sin embargo, Paniagua no supo explicar cómo funcionará lo relativo a la presencia en los recintos penitenciarios de los delegados de los partidos políticos que llevarán candidaturas presidenciales.
Tampoco supo decir si trabajarían como delegados de los partidos reclusos identificados por las organizaciones o si irían personas extrañas expresamente a vigilar y verificar la transparencia del proceso.
