Un nuevo sismo de magnitud 4,8 en la escala Richter volvió a sacudir a primera hora de hoy las zonas del centro de Italia afectadas por el devastador seísmo del 24 de agosto y causó nuevos derrumbes, pero ningún daño a los equipos de rescate que siguen trabajando en la búsqueda de personas bajo los escombros.
La tierra no dejó de temblar en toda la noche y se produjeron más de 60 réplicas de una magnitud de entre 3 y 4, la mayor de ellas fue la de las 6.28 horas locales (4.28 GMT) y duró más de un minuto, según los datos del Instituto Italiano de Geofísica y Vulcanología.
Según los medios italianos, los nuevos temblores han causado ulteriores derrumbes sobre todo en Amatrice, ya completamente devastado por el terremoto de magnitud 6.0 del 24 de agosto. Los equipos de rescate han continuado toda la noche buscando personas bajo los escombros, tanto en Amatrice como en Pescara del Tronto, las localidades donde aún se cree hay desaparecidos.
Algunos cuerpos han sido hallados durante la noche. En concreto se encontraron los cadáveres de dos personas en el Hotel Roma de Amatrice, donde se sabía que podían haber personas atrapadas, así como el cuerpo de la tercera monja fallecida del convento de esta localidad turística de la provincia de Rieti. El número provisional de 250 muertos confirmados hasta ahora por la Protección Civil italiana está destinado a crecer.
Mientras, más de 1000 evacuados han pasado una segunda noche en las tiendas de campaña y gimnasios puestos a disposición por la Protección Civil para quienes han perdido sus casas. Estas personas han vuelto a pasar una noche de terror ya que los seísmos han sido fuertemente advertidos. EFE