LA HABANA (EFE).-Aunqe el principal acto de tributo para que los cubanos se despidan de Fidel Castro tiene lugar en la Plaza de la Revolución, los homenajes al fallecido líder socialista se repiten en otros puntos de La Habana, de la elegante zona de Cubanacán al popular barrio de Marianao.
La población se apresura a dar su último adiós al exmandatario, fallecido el pasado 25 de noviembre a los 90 años, antes de que sus cenizas dejen para siempre La Habana camino de Santiago, donde será enterrado Castro el próximo domingo.
Uno de los lugares más emblemáticos en el que los habaneros están presentando sus respetos al comandante revolucionario es en Ciudad Libertad, en el barrio de Marianao, un lugar considerado bastión de la enseñanza y la educación propugnados por la Revolución como uno de sus pilares.
En el lugar que antes albergó la primera fortaleza del régimen de Fulgencio Batista y que por orden de Fidel Castro pasó a ser escuela de nuevos maestros, cientos de personas desfilaron ante una foto del exmandatario y fueron dejando flores sobre unos cestos de paja.
Allí se vio a cubanos que se cuadraron y realizaron un saludo militar ante la fotografía de Castro y otros que se persignaron, a una mujer que entre sollozos solo alcanzó a murmurar "hasta siempre", y a otra que acarició con veneración la imagen del comandante.
A diferencia del silencio y la solemnidad que presiden el acto de la Plaza de la Revolución, en estos lugares sí se escuchaban notas de son cubano y se respiraba un ambiente más relajado. También en la zona de Cubanacán, un área mucho más lujosa en la que residen sobre todo diplomáticos y ejecutivos de empresas extranjeras, se habilitó un "punto alternativo" de homenaje en el Pabellón de Exposiciones "Pabexpo".
Fue uno de los lugares en los que se vio a adolescentes de uniforme escolar despidiéndose de un hombre al que apenas recuerdan gobernando Cuba, ya cuando dejó el poder en 2006 aún eran muy pequeños.
Médicos y enfermeras con bata blanca, cocineros con chaquetilla y mandil, mecánicos con mono de trabajo buscaron un momento para escaparse de sus puestos de trabajo y despedirse de Fidel.