Golden State Warriors hizo respetar su hogar, y ante más de 19 000 espectadores que se dieron cita en el Oracle Arena, demostró estar listo para vencer a Cleveland Cavaliers, conjunto que llegó con grandes expectativas, porque en el primer enfrentamiento superó al conjunto de Oakland con poca superioridad, por lo que este era el examen final antes de verse seguramente en las finales de este curso.
Con un marcador de 126-91, el equipo local mostró su superioridad ante su máximo rival, que no se guardó nada pese a algunas especulaciones que hubo en las últimas horas. Con parciales de 37-22, 41-27, 17-22 y 31-20, la diferencia de 35 unidades fue más que evidente para demostrar que están listos para luchar por el anillo de campeones, ese mismo que hace un poco más de seis meses se les escapó de las manos cuando llegaron a tener la serie 3-1 a favor, aunque al final esta terminó 4-3 a favor de los de Ohio.