VATICANO (ACI).- El Papa Francisco continúa con el corazón puesto en Venezuela dada la dramática situación que está viviendo el pueblo, y después de rezar el Ángelus, hizo un nuevo llamado a poner fin a la violencia y animó a encontrar "una solución pacífica y democrática a la crisis".
"El 5 de julio se celebra la fiesta de la independencia de Venezuela. Aseguro mi oración por esta querida nación y expreso mi cercanía a las familias que han perdido a sus hijos en las manifestaciones que se dan en las plazas".
"Hago un llamado para que se ponga fin a la violencia y se encuentre una solución pacífica y democrática a la crisis. ¡Que Nuestra Señora de Coromoto interceda por Venezuela!".
A continuación, el Papa invitó a recitar el Ave María.
El pasado 8 de junio, algunos obispos de la Conferencia Episcopal de Venezuela se reunieron con el Papa en el Vaticano para darle detalles por la situación por la que atraviesa el país.
Desde hace meses, las protestas contra el régimen venezolano no se detienen y los manifestantes sufren la violencia y la represión por parte de las fuerzas del orden. Se estima que alrededor de 86 personas han muerto durante las protestas, aunque el Ministerio Público reconoce solo 75 fallecidos.
La población intenta sobrevivir con la escasez de medicinas y alimentos fruto de las decisiones del gobierno del presidente del país, Nicolás Maduro.
En declaraciones a los medios, el Presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), Mons. Diego Padrón, afirmó a los medios hace unos días que el Papa Francisco está "realmente conmovido por la situación" del país y aseguró que apoya las acciones de los obispos para paliar en algo los efectos que la crisis tiene en la vida de la población.