Funcionarios de la gestión municipal que encabezó Nelson Guillén negaron que al finalizar su mandato hayan dejado una deuda de 337 millones de pesos, de los cuales 228 corresponden a demandas pendientes de conocimiento en los tribunales de la República.
Los licenciados Nelson Uribe, ex-contralor del Ayuntamiento de San Cristóbal, y Héctor Mojica, consultor jurídico, señalaron que la generalidad de esa deuda corresponde a la gestión de Raúl Mondesí y explicaron que no fue pagada porque casi todas carecían de soportes que las avalaran.
Citaron entre esa deuda el cobro de 49 millones de pesos por servicio de recogida de basura que hace la empresa Caribbean Fleet.
“Creen ustedes que es justo que este municipio pague 49 millones de pesos por el servicio de recogida de basura, cuando el gobierno se vio en la obligación de declarar nuestra ciudad en estado de emergencia en dos oportunidades por la cantidad de desechos sólidos que se acumulaban en nuestras calles”, expresaron.
Con relación a la deuda de 75 millones de pesos pendiente con la Tesorería de la Seguridad Social, aclararon que la misma se inició en el primer mandato del
Señor José Montás y que la misma llegó a la suma de más 6 mil 191 millones de pesos.
Dijeron que gracias a la gestión de la dirección de la Federación Dominicana de Municipios (FEDOMU), de la que Guillén era dirigente, logró que el Congreso Nacional aprobara una ley que otorgó una amnistía que redujo considerable la misma, con el compromiso de hacerr un acuerdo que permita concluir el pago de los 75 millones de pesos a más tardar en el año 2027.
Uribe y Mojica lamentaron que en vez de informar correctamente sobre la situación positiva que encontraron en el Ayuntamiento se hayan dedicado a desinformar con el propósito de hacer de maltratar la imagen de las pasadas autoridades.