Por Alexander Vallejo

En entrevista para el programa Loyola Es Pastoral de la emisora ​​Magis 98.3 FM, José Ramirez (padre Joselito), director del Instituto Preparatorio de Menores, conocido como "el reformatorio", expresó que los jóvenes que llegan al Centro en condición de internos, han sido enviados por el Tribunal de Niños, Niñas y Adolescentes de San Cristóbal tras cometer infracciones legales y presentar serios problemas de conducta. 

El sacerdote, quien pertenece a la orden religiosa de los Terciarios Capuchinos, mejores conocidos como "Los Amigonianos", señaló que los jóvenes que ingresan a ese instituto "llegan desechos, con muchas heridas personales y familiares", atribuyendo esta situación a que en sus Los hogares han sido víctimas de agresiones como la violencia física y el abuso sexual por parte de sus parientes, así como de falta de amor y abandono, por eso terminan cayendo en los lazos de los vicios y el delito.

El padre Joselito demostró que en el Instituto Preparatorio de Menores se les da amor, respeto y se fortalece la autoestima de los jóvenes que son referidos al centro especializado, contribuyendo a que puedan empezar una nueva vida al cumplir su pena. Agregó que "el reformatorio les devuelve la dignidad a estos jóvenes que están internos".

Detalló que como parte de su proceso de regeneración, se les brinda acompañamiento espiritual, psicológico, recreación sana y educación de alta calidad. Actualmente la instalación cuenta con 32 menores excluidos.

El funcionario indicó que también brinda formación académica en todos los niveles al público externo, formada por jóvenes no internos siempre y cuando sean referidos por la autoridad judicial correspondiente. La población estudiantil actual supera los 600 alumnos.

El religioso subrayó la necesidad de que el llamado "reformatorio" cuente con el apoyo estatal requerido para completar la segunda etapa de las edificaciones iniciadas, así como un reajuste del salario del personal que labora en ese valioso espacio regenerador.