Como manso, humilde y muy inteligente, fue definido por su bisabuela Victoria de los Santos, el niño de ocho años que fue torturado por una tía hasta morir, en el distrito municipal Verón, Punta Cana, provincia La Altagracia.
Entre llanto, la señora confesó que el papá del infante creyó en su hermana para que se lo atendiera, y cada vez que él iba a ver a su hijo ella se lo negaba y le decía que estaba para la escuela o que ella no estaba en casa.
Alegó que el menor de iniciales C.C.A. sólo tenía ocho meses bajo la tutela de su confesa verduga Carmen Jiménez.
Detalló que el malogrado menor sólo tenía ocho meses bajo cuidados de la tía, y que al parecer ella lo tenía amenazado, porque cada vez que hablaba con la madre por teléfono le decía que estaba bien.
La señora Victoria de los Santos declaró que la noche del suceso, el fiscal de Verón la llamó para preguntarle si conocía al niño, “y yo le dije que sí y le avisé a la mamá”.
Entre llantos, salió del tribunal Yennifer Álvarez Pérez, madre del infante, por lo que no dio detalles a la prensa.
El niño fue velado lunes en casa de su bisabuela en el sector Villa Esperanza de esta ciudad Higüey y sepultado a las 5:00 de la tarde en el cementerio el Buen Pastor.