Con el saldo de al menos una persona muerta en el tercer día consecutivo de protestas en Haití, que esta oportunidad se trasladaron a los alrededores de la casa del presidente, Jovenel Moise, continua la crisis en el vecino país.
Mientras que sindicatos de transportistas en Haití junto a sectores políticos se unificaron en un pedido para exigir la renuncia del mandatario.
Las protestas violentas de los tres últimos días en Haití alcanzaron ayer la ciudad de Malpasse (sureste), fronteriza con República Dominicana.
Petionville, junto con Puerto Príncipe y Croix Des Bouquets, los tres grandes municipios de la zona metropolitana, así como Saint Marc y Jacmel han suspendido las actividades previas al carnaval que se iban a celebrar durante el fin de semana, como consecuencia de las protestas.
Además, persiste la escasez de gasolina, puesto que la situación de incertidumbre e inseguridad complica la distribución, de modo que muchas estaciones de combustible permanecen cerradas y, en las que están abiertas, se han formado largas filas de vehículos para repostar.Fuente