Más de 40 iglesias de distintas confesiones cristianas doblaron las campanas el domingo 1 de septiembre pidiendo por el fin de la violencia en Hong Kong, importante ciudad china que en los últimos meses ha sido escenario de protestas, algunas violentas, a causa de una polémica ley de extradición.
En total fueron 44 iglesias las que doblaron las campanas desde la 1:00 p.m, 21 de las cuales eran católicas, 16 anglicanas, 5 metodistas, y de otras confesiones.
Según informa UCAnews, la campaña fue lanzada por Theresa Lee, una católica local, quien dijo estar “profundamente preocupada” por la situación actual.
Joseph Chan, un católico de la parroquia St. John the Baptist, dijo a UCAnews que ofreció sus oraciones por el fin de la violencia a través del diálogo constructivo. En su iglesia no se usó una campana, sino un tazón cantador, un instrumento del que se obtiene un sonido similar; y luego 300 fieles cantaron “Sing Hallelujah to the Lord” (Canta Aleluya al Señor).
En su opinión, la campaña muestra que “aunque hay muchas opiniones en la sociedad, creo que la Iglesia debe proclamar el mensaje de paz con las enseñanzas de Jesús”.
De otro lado, Joe Chan, de la Holy Cross Church, comentó que participar de la campaña lo ayudó a “sentirse involucrado” con lo que sucede mediante la oración. “Muchos fieles están tensos, desesperanzados e incluso molestos. Siempre preguntan cuándo va a terminar todo esto y qué se puede hacer”.
El Cardenal John Tong, Administrador Apostólico de Hong Kong, y otros líderes religiosos solicitaron a las autoridades que establezcan un “periodo de tregua” de dos meses.
Asimismo, el Coloquio de los seis líderes religiosos de Hong Kong, que incluye a la Iglesia Católica, protestantes, budistas, taoístas, musulmanes y confucionistas, indicó el 30 de agosto que este tiempo de tregua debería ser usado por el Gobierno y los manifestantes para meditar y colaborar con el bien común.
¿Por qué hay protestas en Hong Kong?
Las protestas en Hong Kong comenzaron hace unos tres meses como respuesta a un proyecto de ley de extradición a China. Este proyecto de ley acabaría con la autonomía de Hong Kong, que cuenta con un sistema legal propio respecto a China continental, donde la ley es más represiva.
Entre las manifestaciones más numerosas están las del 18 de agosto con 1,7 millones de personas; y la del 6 de junio que reunió a unos dos millones de personas. No todas las manifestaciones hasta ahora han sido pacíficas; en numerosas ocasiones tanto la policía como los manifestantes recurrieron a la violencia.