Dios está allí, en alusión a la iglesia dijo el Papa Francisco, está en la razón por la cual no se ha derrumbado a pesar de que durante dos siglos de historia ha habido también muchos “pecados y tantos escándalos”. Así lo indicó el Santo Padre al improvisar en su catequesis semanal de este miércoles 18 de septiembre en la Plaza de San Pedro del Vaticano.
“Pensemos en la historia de los cristianos, también en la historia de la iglesia, con tantos pecados, con tantos escándalos, con tantas cosas feas, durante estos dos siglos. ¿Por qué no se ha derrumbado? Porque Dios está allí. Nosotros somos pecadores, también muchas veces damos escándalo, muchas, pero Dios está con nosotros, y Dios salva primero a nosotros y después a ellos, pero siempre salva el Señor, la fuerza es Dios con nosotros”, dijo el Pontífice en una intervención espontánea.
Durante su catequesis pronunciada en italiano, el Santo Padre continuó a reflexionar sobre el libro de los Hechos de los Apóstoles y destacó que ante “la prohibición de los judíos para enseñar en el nombre de Cristo, Pedro y los Apóstoles respondieron con valentía”.
“Los doce mostraron poseer aquella ‘obediencia de la fe’ que querrán suscitar en todos los hombres”, destacó el Papa quien explicó que “a partir de Pentecostés, de hecho, no son más hombres ‘solos’. Experimentan aquella especial sinergia que los hace descentrarse de sí mismos y les hace decir: ‘nosotros y el Espíritu Santo’ -y añadió- sienten que no pueden decir ‘yo solo’, si no más bien, ‘nosotros y el Espíritu Santo con nosotros’, son hombres descentrados de sí mismos”.
Sin embargo, el Pontífice reconoció la valentía “impresionante” que tenían los apóstoles quienes “no se dejan intimidar por ninguno”, pero recordó también que no fueron siempre así. “Pensemos que eran cobardes, todos escaparon, huyeron, cuando Jesús fue detenido… Todos, de cobardes a valientes así. ¿Por qué? Porque estaba el Espíritu Santo con ellos”, afirmó.
“Lo mismo nos sucede a nosotros, si nosotros tenemos dentro al Espíritu Santo, tendremos la valentía de ir hacia adelante,